No estoy solo
De Iván Haidar
Performance unipersonal que a la vez es un dúo entre Iván Haidar y sus huellas digitales. Iván no está solo, e intenta demostrarlo a través de pruebas para estar con uno mismo, transitando la soledad como un modo posible de convivencia. El dúo entre el cuerpo físico y sus fantasmas virtuales es una operación para hacer tangible aquello que imagina.
Es un ritual que manifiesta la frontera entre la vida y la muerte. Se desarrolla en el silencio absoluto de la sala. El performer utiliza el tacto como herramienta para activar los sentidos, como vehículo para poder comunicarse. Tocar y no tocar, dejarse tocar, tocar una pared, tocar su sombra, tocar una imagen de sí mismo. El CUERPO como eje del trabajo: la carne, los huesos, el corazón, la respiración, la piel, las emociones, el alma. Son los restos, la ausencia de un otro, el recuerdo de lo que queda. Este trabajo es el cierre de un ciclo, y se presenta como un acto de magia, una invocación, una despedida.
Creación / Dirección / Interpretación
Iván Haidar
Diseño y realización de dispositivo escenotécnico
Sol Santaca
Asistencia técnica
René Martiñan
Gestión, curaduría y distribución
Jimena García Blaya
Producción
Iván Haidar
Asesoramiento artístico
Florencia Vecino – Soledad Pérez Tranmar